miércoles, 15 de julio de 2015

Si Grecia se va, yo me apunto

Groucho dijo aquello de que no pertenecería a un club que le admitiese como socio. Lo que nunca me quedó muy claro es si querría ser de uno que no le admitiese. Quizá sí, por aquello de molestar y por mor de la paradoja. Pero yo no.

No sé qué hay detrás de la claudicación de Chipras. No tengo ni idea y, por lo que leo, muchos de sus compañeros de partido tampoco, lo cual es preocupante, porque indica lo de siempre, que las verdaderas razones de la política nunca se conocen. Pero lo que sí sé es que los modos que se está gastando la Unión Europea con Grecia son intolerables. La desconfianza hacia sus gobernantes, la falta de empatía con la situación de sus ciudadanos, la humillación a la que están sometiendo a un país por haber cometido el pecado de votar a un partido de izquierdas y el desprecio y hasta la inquina con la que han reaccionado al referéndum, no son propios ni de gente civilizada ni, desde luego, de unos socios. Más bien recuerda a usureros mafiosos y a enemigos.   

Ahora el FMI dice que el tercer recate no va a servir para nada porque la deuda que tiene Grecia es impagable. Acabáramos. Eso ya lo sabíamos. Pero, ¿entonces?, ¿qué pretenden? En cualquier otro ámbito económico, cuando el deudor no puede pagar, los acreedores negocian con él la deuda, la reestructuran, incluso se realizan quitas de dicha deuda. Pero en este caso la Troika ha preferido estrangular a Grecia. ¿Por qué? ¿Cómo castigo? ¿Por qué pecados? ¿Desde cuándo el asunto de los dineros se ha convertido en un tema moral?

Cada vez está más claro que Grecia acabará fuera del euro. Ahora mismo no podrían, según Chipras, pero parece claro que, a la larga, si nada cambia, será la única salida. Si eso pasa, yo voto porque nos vayamos con ellos. No de  Europa, porque eso es absurdo: Grecia y España son Europa, diga lo que diga Alemania y el FMI, sino de unas instituciones antidemocráticas dominadas por intereses económicos bastardos que han demostrado, además, una torpeza inimaginable al no tener previsto qué pasaría si las cosas iban mal. Porque no lo tenían previsto, no tenían prevista una crisis. Pensaban que lo estaban haciendo tan bien que no era necesario hacer planes para crisis así. Se puede ser más malo, pero no más tonto.

Eso sí: cuidado con los acuerdos que se obliga a firmar al perdedor, porque las consecuencias pueden ser terribles. Los aliados impusieron a Alemania el Tratado de Versalles, y luego vino la Segunda Guerra Mundial. No digo yo que Grecia le vaya a declarar la guerra a Alemania, pobrecillos, pero por algún sitio se empieza.


Putin la debe estar gozando.  

7 comentarios:

  1. Grecia tiene uno de los ejércitos más potentes de Europa, su guerra fría particular con Turquía hace que sea el último sitio del que pretendan recortar ni los que mandan ahora, también puede que haya algo de miedo interno, el poder siempre se ha sostenido/cambiado a golpe de tambor, pero esos mismos miedos son los que impiden su uso fuera de su propio territorio... o aquel que consideran su territorio. Turquía es demasiado poderoso para ir por ese lado, y por el otro, están los balcanes del que Grecia no es más que una extensión, aunque tuvieran ánimos desestabilizadores, aunque entrasen en FYROM por su otro conflicto permanente con Macedonia (no olvidemos que lo de Former Yugoslavian Rep... viene por la coincidencia del nombre constitucional del pais con una región de Grecia que ya puestos también reclaman como parte del mismo y que Turquía es el único país que lo reconoce tan cual por lo que está claro con quien se alinearía y la OTAN no podría intervenir según sus propios estatutos. No sería como la Alemania invadiendo Austria o Polonia donde recordemos, nadie levantó la mano para evitarlo, aquí tendrían mucha tela y no ganarían nada con ello.

    El fondo de la cuestión creo que está precisamente en España, Europa puede permitirse un descuelgue eventual de Grecia, pero no de España así que insuflar miedo es bastante importante para los de siempre, pero de tanto soplar, los globos explotan.

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  2. Perdona por el tostón, le he dado a publicar sin revisar... es lo que pasa cuando se quiere decir mucho en poco sitio... ni se ocupa poco sitio, ni se entiende lo que se dice por lo que tampoco parece que se diga nada.

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    1. De tostón nada: reconozco que tiendo a la categoría y a olvidar los detalles, pero la realidad está, precisamente, en los detalles. En este caso tus detalles nos muestran con meridiana claridad que esa zona de Europa sigue siendo el polvorín que ha sido siempre y que nos deberíamos de andar con cuidado si no queremos repetir viejos y recurrentes errores.

      Gracias.

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  3. Estoy de acuerdo en casi todo lo que dices, pero hay una cosa en la que entiendo a las instituciones, y es la desconfianza hacia los gobernantes griegos. Entregan propuestas fuera de plazo, llegan tarde a las reuniones, hay divergencias entre lo que dicen y lo que hacen, dan entrevistas acusando de terroristas a aquellos con los que negocian, convocan un referéndum sobre una propuesta que a la finalización del mismo ya había expirado. Quizá sean sofisticadas técnicas de negociación ideadas por el talentoso Varoufakis; a mí me parecen comportamientos inapropìados.

    Según lo que oigo y veo hay buenos y malos, según dónde lo oigo y veo los malos son unos u otros. Yo pienso que hay malos (y tontos, e irresponsables) en ambos lados de la mesa de negociación.

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  4. Sí, sin duda, hay buenos, malos, tontos y tontos de remate en ambos lados. El problema es que se identifique a esos tontos con la gente que representan. No entiendo lo que ha hecho Chipras. Me parece inaceptable que convoque un referéndum para, inmediatamente, hacer lo contrario de lo votado. Y puedo opinar muchas cosas de los modos de unos y otros. Pero, sinceramente, me da igual. Porque esto de las formas no justifica, no debería de justificar, la miseria de millones de personas. Los malos gobiernos griegos no justifican que la UE se comporte con Grecia, con los millones de griegos, como usureros. Nada justifica el desprecio y la rabia con la que las instituciones europeas han encarado el referéndum. Y, sobre todo, nada justifica que se considere a los griegos culpables de lo que está pasando cuando el diseño del euro es de quien es; cuando el no prever planes para afrontar crisis económicas es culpa de quien es; cuando defender una unión económica sin una unión política es culpa de quien es; o cuando el crecimiento de la deuda griega, como el de la española, no solo es de quien pidió los préstamos, sino también de quien los concedió.

    Un ejemplo de la perversión con la que se está viendo todo esto es el siguiente: si tú vas a un banco, pides un préstamo y te lo conceden, ¿piensas que están siendo solidarios contigo? No, ¿verdad? Pues yo estoy harto de oír lo solidaria que está siendo Europa con Grecia. Estoy más que harto de escuchar cómo altos funcionarios europeos se quejan de que Chipras convocase un referéndum. Y estoy avergonzado, profundamente avergonzado de que mi gobierno, perteneciendo a un partido plagado de corruptos, vaya dando lecciones de cómo se cumplen las reglas.

    ¿Qué desconfían? Perfecto: que exijan todos los controles del mundo. Pero que usen esa desconfianza como excusa para no renegociar la deuda me parece repugnante.

    Lo que está pasando, entre otras muchas cosas, es que Grecia tiene un gobierno que no le gusta a derecha que gobierna Europa. Y, entre otras muchas cosas, se los quieren cargar. Y eso es intolerable, es un golpe de estado perpetrado por instituciones que se presentan como paladines de la libertad. Pero no es cierto. No defienden la libertad. Defienden su posición de poder, el suyo y el de quienes les promocionan. Y no puede ser. No podemos condicionar la vida de millones de europeos, no podemos condenar a la miseria a millones de europeos por estas mierdas. Esto es lo que me indigna, y lo que me hace apostasiar de mi última creencia. La unión europea es un fracaso, es un fraude, no tiene nada que ver con esos valores que empezaron precisamente en Grecia y que desarrollaron muchos otros europeos durante dos mil años, entre ellos muchos alemanes que abominarían de los que está pasando.

    Ahora soy yo el que pide perdón por el exabrupto, pero es que estoy realmente enfadado.

    Daniel, un saludo.

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  5. Creo que estamos ante una crisis del modo de vida occidental, y curiosamente quién está pagando el pato primero es la cuna de la civilización occidental, Grecia.

    El dinero se ha vuelto dios y cualquier otro valor ético queda por debajo. China ha demostrado que se puede conseguir mucho dinero sin a) ser una democracia y b) sin garantizar un estado de bienestar que se creía inherente a cualquier estado civilizado y moderno. Los políticos se han vuelto unos seres que pelean más por mantener sus privilegios y sus estatus que por servir a sus ciudadanos y que muestran su verdadera cara cuando los ven amenazados. Si Grecia saliera del euro, se vería que la unión europea es una farsa y se resquebrajaría, yendose a la porra muchos puestos de funcionarios y muchos puesto de políticos, aparte de que paises como Alemania perderían su poder e influencia. Tal vez llegaremos a ver el día en que eso pase, pero creo que todavía habrá más idas y venidas, más amenazas y más pérdida de eso que llamamos espíritu democratico.
    Dicen que entre paises con democracias nunca ha habido guerra, pero se está tensando la cuerda demasiado: Putin quiere revivir viejos fantasmas, la ultraderecha griega está llamando a la puerta, y por cosas más tontas, como la muerte de un Archiduque, se han producido guerras espantosas. Esperemos que no ocurra lo peor.

    Saludos.

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    1. En cuanto a Chipras (como se escriba) quiero pensar que quería ganar tiempo para algo, para algún plan que le ha salido mal, no quiero pensar que ha sido otro paripé, no quiero pensar que, en el fondo, está conchabado de alguna forma. Quiero pensar...

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