martes, 28 de abril de 2015

Segunda consideración intempestiva. De la utilidad o inconveniencia de la historia para la vida

Leo la Segunda consideración intempestiva. De la utilidad o inconveniencia de la historia para la vida, de Nietzsche. La idea está clara: un exceso de historia inmoviliza y reduce la vida: por eso, frente al historicismo hegeliano, Nietzsche aboga por la forja del futuro, por buscar en nosotros mismos nuestras propias necesidades y construir un futuro que las satisfagan, y esto siguiendo a los viejos griegos, quienes, en sus momentos de esplendor, fueron ahistóricos.

El librito, sin llegar a ser lo que luego serían sus grandes textos, ya muestra esa mezcla tan suya de erudición, revelaciones espectaculares, brillantes chispazos de inteligencia y viejos resabios románticos.

Qué tipo más listo.

jueves, 23 de abril de 2015

Talea, el espectralismo de Gerard Grisey

El espectralismo trata del sonido analizado, del espectro sonoro, y hace por tanto hincapié en el timbre. No hay que esperar melodías, ni armonías, sino sonidos.  Con lo que sí juega la pieza Talea, de Gerard Grisey, es con el tiempo: sus silencios, sus repentinos arranques, sus notas alargadas, nos introducen en un tiempo distinto al cronométrico, el de la música.

domingo, 19 de abril de 2015

Music for the Funeral of Queen Mary, de Purcell

Purcell tiene algo especial. Se ponga solemne o tabernario, le cante a la muerte o a la vida, que es su prólogo, te hace sentir una historia, te hace vivir una experiencia.

La pieza que propongo, La música para el funeral de la reina Mary, le sonará a quienes, por viejos y/o por ser fans de Kubrick, recuerden su película La naranja mecánica.

sábado, 18 de abril de 2015

Las Murallas de Samaris, de Schuiten y Peeters

Por aquello de que lo han vuelto a editar, releo el volumen Las Murallas de Samaris de Schuiten y Peeters que ya leí hace treinta y dos años. 

El don de Schuiten para crear arquitecturas mágicas, subyugantes, oníricas, metafísicas es incomparable. El de Peeters para hablar de la realidad a través de lo fabuloso, único.

viernes, 17 de abril de 2015

Cromáticas, de Zentner y Pellejero

Leo Cromáticas, cinco historias de Jorge Zentner y Ruben Pellejero con un único rasgo en común: tener un color predominante. 

La verdad es que esta pareja, sin ser extraordinarios, sin dibujar como Moebius o escribir como Trillo, hizo cosas magníficas, como estos relatos un poco negros, pese al colorido, y emocionantes, aunque socarrones. El trazo suelto pero expresivo de Pellejero dibuja perfectamente las historias de Zentner, de una economía deslumbrante. No le hacen falta largas parrafadas. No tiene que salir nadie contando la historia. Una de ellas, Mont Blanc, he tardado bastante en entenderla. Me he tenido que ir a andar. Entonces lo he visto: el tipo que está subido al árbol va a cambiar su mente con el joven fotógrafo que ha llegado a su esquina del mundo para poder complacer a su joven esposa. Pero nada de esto se cuenta. Solo vemos una viñeta en la que un bang sale de la cabaña del árbol. ¿Se ha suicidado el viejo? No: se ha suicidado el joven al verse transferido al cuerpo viejo. 

Ah, qué gusto da esta gente inteligente que te hace sentir, aunque sea por un momento, inteligente.

miércoles, 15 de abril de 2015

Galeano y la bomba de neutrones

“Quizás el más certero símbolo de la época sea la bomba de neutrones, que respeta las cosas y achicharra a los seres vivos”

Eduardo Galeano en Patas Arriba. La Escuela del Mundo al Revés

jueves, 9 de abril de 2015

Retrato de la bailarina Anita Berber, de Dix

Otto Dix era un salvaje. Pintó el mundo que le tocó vivir sin contemplaciones. En la exposición Clefs de una passion, en la Fundation Louis Vuitton de Partís me encontré con este Retrato de la bailarina Anita Berber.

martes, 7 de abril de 2015

Guerrilla Girls

Veo en el Matadero una exposición sobre la obra de las Guerrilla Girls. Es gracioso, interesante, es posmoderno eso de la guerrilla urbana, y cachondo pensar lo que les joderá a los pijos de los neoyorkinos que los tachen de machistas, racistas y conservadores en general.

Pero son muy superficiales, porque todo su diagnóstico acerca de la diferencia enorme que hay entre la presencia del hombre blanco en el arte y la de mujeres y gente no blanca es que se debe únicamente a una especie de confabulación, de complot de los galeristas.

Hay discriminación, claro que sí, y prejuicios, pero ¿confabulación? No, no lo creo. Pienso que es aún peor: no hay un acuerdo entre los galeristas o los directores de los museos para excluir a unos u otros. Simplemente, se dejan llevar de sus prejuicios, de las costumbres, de los circuitos establecidos, de las reglas no escritas, de las relaciones de amistad, de los intereses económicos, y los excluyen.

Las teorías de la confabulación son contraproducentes porque simplifican el problema y hacen creer que es fácil de resolver, cuando no lo es. La culpa no es de unos cuantos hombres poderosos. Ni siquiera de los hombres como sexo. Es del sistema, de la especie, de la evolución, de la pendiente historia. Si queremos acabar con la discriminación no basta con señalar a un grupo de conspiradores: hay que entender cuánto hay de genético y cuánto de histórico en los prejuicios y realizar un enorme esfuerzo de civilización para neutralizarlos, y esto tanto en los que excluyen como en aquellos que se autoexcluyen por no sentir la motivación suficiente para entrar en el juego.

En cualquier caso, insisto, siempre es bueno que haya gente que toque las narices.

domingo, 5 de abril de 2015

¿Quién teme a Virginia Woolf?

Película de Mike Nichols, ¿Quién teme a Virginia Woolf? está basada en la obra de teatro Who's Afraid Of Virginia Woolfde Edward Albee. La protagonizaron Richard Burton y Elizabeth Taylor.

Él es un profesor universitario de historia de cuarenta y tantos. Ella, su mujer, la hija del rector, atractiva, pero ya mayorcita. Tras una fiesta, invitan a su casa a un joven profesor de biología y su mujer. Lo que parece un simple acto social es un juego de la pareja mayor para revisar sus miserias delante de la joven pareja que pronto abandona su papel de público para intervenir, involuntariamente, en la guerra de insultos y desprecios.

En la fiesta previa la única gracia fue cuando a alguien se le ocurrió cantar “¿Quién teme a Virginia Woolf?” en vez de “¿Quién teme al lobo feroz?” (en inglés tiene sentido: cantan “Who's Afraid Of Virginia Woolf?” en vez de “Who's Afraid Of The Big Bad Wolf”). Después volverán a cantarla en varias ocasiones con la intención de recuperar el ambiente festivo, pero sin éxito: pronto sus odios, sus frustraciones, sus mentiras y sus miserias vuelven a atraer su atención.

Es particularmente terrible cómo la pareja joven ve en los otros dos su futuro.

miércoles, 1 de abril de 2015

Noche transfigurada, de Schönberg, por Boulez

Schönberg, antes de su revolución dodecafónica, fue un postromántico que llevó la tonalidad a sus límites. El ejemplo más conocido es el sexteto de cuerdas Noche transfigurada, composición inspirada en el poema homónimo de Richard Dehmel.

El poema cuenta cómo una mujer le confiesa a su amante que está embarazada de otro hombre, de un desconocido. Las emociones que se suceden en ese paseo nocturno mientras "atraviesan un desolado y frío bosque" son las que Schönberg traduce musicalmente de modo magistral.