lunes, 26 de diciembre de 2011

Una elección estética


A la mayoría de los habitantes de los países ricos, el mundo le vale como está. Todo es mejorable, claro, y es cierto que se producen crisis, en especial económicas, claro, pero, en líneas generales, a la mayoría le parece que el mundo está bien así. Y esto no es una opinión personal: lo dicen los estudios de opinión; lo dice el hecho de que, la mayoría, vote en los distintos comicios a partidos políticos conservadores (se digan estos de derechas o de izquierdas); y lo dice la elección de sus héroes: deportistas, modelos, cantantes pop...

A mí, el mundo, me parece una inmensa mierda granada con pepitas de oro. Me lo ha parecido desde mi más tierna adolescencia, y este parecer, aunque se ha matizado mucho al convertirme en experto en el hallazgo de las dichosas pepitas, no ha cambiado sustancialmente. Este juicio me llevó de crío a soñar con futuros no mejores, sino radicalmente distintos y, desde entonces, no he dejado de soñar. Al principio, más que de sueños se trataba de predicciones, tan completa era mi confianza en el futuro. Pero, con el tiempo, esa confianza se fue reduciendo, imperceptible pero inevitablemente, hasta acabar desapareciendo por completo.

Esta incursión biográfica tiene por objeto explicar un poco a qué vienen las ideas que estoy intentando perfilar últimamente. Y no solo a ti, lector, sino a mí mismo, porque como en todo work in progress, las motivaciones y los objetivos se van fijando al tiempo que se desarrollan las ideas mismas. Mi vida, en lo que concierne a mi esfera más inmediata, es buena. No sé si resultará ofensivo lo que voy a decir, pero lo cierto es que disfruto del amor, de la amistad, tengo una salud razonable, dinero más que suficiente y hasta mi vanidad se ve razonablemente recompensada de vez en cuando. Sin embargo me empeño en hablar de melancolía, ¿por qué? Pues porque las pepitas de oro están manchadas de mierda.

Es una cuestión estética, y con esto no quiero hacer dandismo. La ética, en cuando empezamos a hacer preguntas, se reduce a estética. Lo bueno y lo malo es lo que nos gusta y lo que no. Todos tenemos una vocecita dentro que nos dice lo que está bien y lo que está mal, incluso los que somos vocacionalmente amorales. Pero esa vocecita no proviene de ninguna divinidad, sino de nuestro personal asesor de estilo, una especie de monstruo de cien cabezas hijo de mil padres.

Decía, sin ánimo de ofender, que mi vida es buena. Pero la verdad es que no lo es del todo. La culpa la tiene mis sueños y los demás. Mis sueños por ser absurdos, y los demás por ser los culpables de que sean absurdos. Uno de mis mayores placeres es saber, pero resulta que el mundo, con frecuencia, sabe mal. Si el futuro soñado es ser estomatólogo, regentar una tienda de ultramarinos o ser banquero, el mundo ofrece grandes posibilidades de satisfacción. Si el horizonte de uno abarca hasta los límites de la urbanización o el resort, el mundo puedes ser limpio y hermoso. Pero como se te ocurra mirar por encima de la tapia...

Quieres disfrutar. Y miras, porque disfrutas mirando. Pero, salvo momentos gloriosos, lo que ves es feo. Durante un tiempo te consuelas pensando que las cosas cambiarán, y hasta luchas para que así sea, pero hoy sabes que no cambiarán. Podrías dejar de mirar, y de actuar, pero no, no puedes, primero porque te perderías los momentos gloriosos y, segundo, porque dejarías de ser tú y eso no puede ser...

¿O sí? Justo aquí es donde entra la estética. Claro que podemos cambiar. Es bueno cambiar, disolver un poco ese yo tan hipertrofiado y probar otras formas de ser. No es fácil, ojo, pero es posible, aunque hay un límite claro, el marcado por la propia estética, porque uno no va a transformarse en algo que no le guste. Inconscientemente podemos hacerlo, ir cambiado poco a poco hasta convertirnos en monstruos para nosotros mismos. Pero conscientemente, como decisión personal, no tiene sentido. Como solución para el problema de la fealdad del mundo podría plantearme en convertirme en un hijo de puta insensible, pero no me apetece, no me resulta atractiva la idea. Podría pensar también en hacerme budista y trabajar para renunciar a todo deseo, pero paso igualmente, porque no me gustaría a mí mismo. No quiero dejar de mirar, no quiero dejar de buscar pepitas de oro por muy manchadas de mierda que estén. Tampoco quiero dejar de soñar con un mundo distinto, ni de luchar porque se produzca el cambio, aun sabiendo que es imposible.

¿Irracional? Bueno, así dicho, la verdad es que lo parece: actuar como si se pudiese cambiar el mundo aun sabiendo que no puede hacerse no parece tener mucho sentido. Optar por vivir en contradicción, por vivir apasionadamente lo que sabemos lúcidamente que no es posible, es una solución sin duda absurda. Pero la existencia, por más vueltas que le demos, es absurda, de modo que cualquier posición que tomemos respecto de ella tiene que ser necesariamente absurda. Así las cosas, la pobre razón solo nos puede ayudar a negociar con nuestra propia locura. Pero lo que no puede evitar es que uno, pasado el subidón endorfínico producido por el ejercicio retórico, se sienta profundamente melancólico. 

20 comentarios:

  1. Creo que ya la comenté por aquí, pero me parece que está frase de Cioran lo resume bastante bien:

    "Cuando se ha salido del círculo de errores y de ilusiones en el interior del cual se desarrollan los actos, tomar posición es casi imposible. Se necesita un mínimo de estupidez para todo, para afirmar e incluso para negar."

    Yo pensaba que decía que se necesita un mínimo de locura, y creo que locura me cuadra más.

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  2. Y en un curioso acto de sincronicidad, yo diría que esta frase que acabo de escuchar en un videojuego también vale:

    "We can't always fight nature, John. We can't fight change. We can't fight gravity. We CAN'T FIGHT NOTHING. My whole life...all I ever did was fight. [...] But I can't give up neither. I can't fight my own nature. That's the paradox, John. You see?"

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  3. Nada hombre, lo que necesitas es salir un rato de juerga. El único sentido de la vida, empíricamente "demostrable" es la perpetuación de la especie y el de la especie, vaya usted a saber...

    Aunque seas ateo y yo también, feliz Navidad.

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  4. En cuanto a tus sueños, esperanzas y la lucha por el cambio aun sabiendo que es imposible, te dejo con esta frase:

    La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar. (Eduardo Galeano)

    Sabemos que el mal es inevitable, inherente al ser humano (por cierto, estoy leyendo El mal de Safranski). No sé muy bien qué pretendes: ¿quieres cambiar tu manera de ser o solamente dejar constancia de que tu manera de ver las cosas te lleva a la melancolía?

    Dices que no te gusta lo que ves, y a su vez eres consciente de que no puedes 'arreglarlo'. La solución puede ser tan sencilla, trivial y parcial como ser buena persona, contigo y con los que te rodean (siguiendo lo que te dice esa vocecita de la que hablas). Parece una perogrullada, pero si todos lo hiciéramos creo que nos iría mucho mejor.

    Por eso creo que lo que hay que cambiar es la educación en todo el mundo: hacer que todos asimilemos desde pequeños valores como la cooperación y la solidaridad, alejándonos de la mentalidad individualista y de competitividad, rechazando siempre la violencia y la desigualdad de oportunidades, etc. Otra utopía, lo sé, pero es un camino más por el que avanzar. Y en esto de la educación creo que algo puedes aportar, eres un modelo, un referente para tus alumnos.

    Te agradezco que compartas estas reflexiones.

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  5. Asier ¿podrias explicarnos que entiendes tu por "buena persona"? Porque yo particularmente cuantas más buenas personas conozco menos ganas me dan de ser como ellos.
    A propósito de las buenas personas hay dos citas muy interesantes que vienen a decir más o menos lo mismo pero con distintas palabras(las cito de memoria, puede que no sean exactas):
    "Este mundo es un lugar muy peligroso pero no por culpa de las cosas que hace la gente mala sino por culpa de los buenos que se quedan mirando" Albert Einstein.
    "Nuestra generación no será recordada tanto por los crímenes de los malvados como por el estremecedor silencio de los bondadosos."
    Martin Luther King

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  6. Lo de "buena persona" sé que es una idea ambigua, discutible, controvertida... incluso contradictoria si me apuras, pero básicamente, resumiendo, me refiero a la persona que sigue principios éticos.

    Claro que entonces preguntaréis qué es eso de principios éticos, quién, por qué y para qué se han definido, si son universales, si son inquebrantables, etc. Dice Alberto que al final "Lo bueno y lo malo es lo que nos gusta y lo que no", pero no estoy de acuerdo, la ética da para mucho más que eso y nos da unas pautas que nos valen de guía para buscar tanto el beneficio personal como el colectivo.

    Evidentemente aquí no hay recetas mágicas, y surgirán conflictos, malentendidos, tentaciones de 'desertar' (estamos inmersos constantemente en 'dilemas del prisionero'), etc., pero a pesar de todo eso, y con el objetivo también de minimizarlo, creo que intentar ser buena persona (lo que para cada uno de nosotros eso significa) es una buena manera de afrontar la vida.

    Y no tiene nada que ver con la pasividad o indiferencia que sugieres con esas frases, Almazul, a veces es verdad que toca luchar o rebelarse.

    Todo esto lo digo siendo consciente de que a veces lo que pensamos que es bueno no lo es y viceversa, o que grandes males han acabado trayendo grandes beneficios o han evitado males mayores. Sé que la vida es caótica, contradictoria y además lo bueno y lo malo forman parte del mismo conglomerado, que no hay uno sin lo otro, etc. Pero creo que aquí estamos hablando de cómo afrontar el día a día, de qué actitud tomar ante la vida que nos toca vivir, y en ese sentido, creo que sí hay unas pautas que podemos seguir (los principios éticos).

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  7. Asier: Para que me entiendas lo que quiero decir con mi crítica a las buenas personas, yo creo, por ejemplo, que las atrocidades que se cometieron en la alemania nazi, no podrian haberse cometido si no fuera por la colaboración por acción u omisión de miles de "buenas personas" que seguramente si les hubieras preguntado si estaban de acuerdo con exterminar a los judios y con las cámaras de gas y todas esas cosas te habrian dicho que no.
    Si preguntaras al maquinista que conducia los trenes en los que trasladaban a los prisioneros a los campos seguramente se encojeria de hombros y te diria que él se limitaba a hacer su trabajo. Si preguntas al soldado que vigilaba la estación , te diría que él cumplia ordenes y que no podia negarse etc Todas esas buenas personas podían ser excelentes hijos, padres, maridos, simpáticos , educados...El nacismo no fue obra solo de 20 o 30 fanáticos racistas, sádicos, si fue posible fue gracias a todas las personas honradas que se limitaban a hacer su trabajo y miraban para otro lado, que no querian saber o peor aún, como diría Primo Levi: "que querian no saber".

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  8. "O sancta simplicitas!", dijo Jan Hus al ver cómo una viejecita echaba una ramita minúscula a la pira en la que él mismo estaba siendo quemado. A Nietzsche le encantaba contar esta historia entre cómica y espeluznante, pero real como la vida misma, porque sé que millones de viejecitas votarían por mandarme al infierno por toda la eternidad, literalmente, si supiesen tan solo de algunos detalles de mi vida privada...
    En cuanto a eso de que hay "principios éticos", "pautas" que podemos seguir, discúlpame Asier, pero no tengo ni idea de a qué te refieres.

    Actuar éticamente es preguntarse por la validez de los propios actos en función de una serie de criterios. La mayoría de la gente es, simplemente, moral, pues sigue unas normas sin preguntarse por ellas, mientras que ser ético es hacerse preguntas por esas normas. Pero ser ético tampoco asegura nada, porque reflexionar sobre lo que uno hace o debe hacer no asegura que todos los "éticos" acabemos haciendo lo mismo. De hecho, ser ético es el mejor camino para acabar haciendo cosas distintas a los demás: la razón es tan veleidosa y los argumentos tan variados...

    Si a lo que te refieres es a la existencia de una moral natural, corto ahora mismo la conversación, porque para supersticiones bastante tengo con la natividad esta del niño-dios. Si lo que apuntas es a algún tipo de ética de mínimos, entonces te rogaría que la explicitases para ver hasta qué punto nos podemos poner de acuerdo; aunque, ya te aviso, legislar es terriblemente difícil.

    Y si no estás de acuerdo con mi reducción de la ética a estética, por favor, muéstrame qué tiene la ética que no sea estética.

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  9. Almazul, siguiendo el ejemplo de los nazis, todas esas personas que mencionas y estaban implicadas pero hacían la vista gorda, no las considero "buenas personas", no actuaron correctamente desde mi punto de vista, participaron de manera activa y consciente en el exterminio. Sé que aquí también es una línea difusa la que separa responsabilidades. Cómplice del mal se puede ser de muchas maneras y a diferentes niveles, pero lo que no estoy dispuesto a aceptar es una extensión sin fin de responsabilidades que acaba abarcándonos a todos.

    Es que me llama mucho la atención ese intercambio de roles: los malos ya no son los que claramente han hecho el daño y sus cómplices directos, sino el resto que ha permanecido más o menos pasivo. Y en ese 'resto' somos capaces de llegar a meter hasta al último ser humano, con el argumento de que todo está relacionado y seguro que algo se podía haber hecho. De esta manera parece que la responsabilidad queda esparcida, y todos acabamos siendo en mayor o menor medida culpables. Los malos somos los demás por no haber evitado o reparado el mal causado. Curioso.

    Alberto, creo que he expresado con bastante claridad las limitaciones de mi 'propuesta', lo digo por la simpática frase que citas de Jan Hus, más aun teniendo en cuenta que estamos ante un problema inabarcable e irresoluble en su totalidad.

    Hablo de una ética de mínimos, sí, y a riesgo de que me puedas volver a soltar la frasecita de Jan Hus, os dejo un principio/pauta base que seguro conocéis: "no hagas a otro lo que no quieras que te hagas a ti". ¿Os parece un buen comienzo?

    Me resulta significativa esta frase: "Pero ser ético tampoco asegura nada, porque reflexionar sobre lo que uno hace o debe hacer no asegura que todos los "éticos" acabemos haciendo lo mismo. De hecho, ser ético es el mejor camino para acabar haciendo cosas distintas a los demás: la razón es tan veleidosa y los argumentos tan variados..."

    Ya he dicho que no hay recetas mágicas, efectivamente no se asegura que los demás se vayan a comportar de esa manera, pero estaremos dando ejemplo. Yo sin embargo sí creo que todos los "éticos" se acabarían comportando de manera similar en lo fundamental, habría una coherencia, me cuesta imaginar actuaciones que a algunos les parezcan éticas y a otros no (que las habrá).

    En cuanto a la ética y estética, no veo la reducción, más allá de como algo poético.

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  10. Asier, es una pena que no nos digas qué tiene la ética que vaya más allá de la estética, pero no voy a insistir. Lo que sí incluyo a continuación es una lista que he elaborado así, a vuela pluma, de asuntos que pueden ser éticamente conflictivos. Por supuesto, no pretende ser exhaustiva:

     La pena de muerte.
     Acostarse con la vecina casada del tercero.
     Contestarle la verdad al nazi que te pregunta si hay un judío escondido en el desván: "sí".
     Delatar a un ladrón de grandes almacenes en paro y con cinco hijos.
     Delatar a la amiga que roba en IKEA por gusto.
     Intentar convencer a alguien de que su fe es absurda.
     Jugar a la bolsa.
     Usar la violencia para alcanzar fines políticos.
     Ganar millones con una empresa de galletas.
     Ganar millones escribiendo novelas.
     Decirle a los tontos que son tontos.
     No decírselo.
     Separar a los chicos de las chicas en las escuelas.
     Las corridas de toros.
     Tirar cabras desde el campanario.
     Cazar perdices.
     Cazar elefantes.
     Tener hijos.
     Abortar.
     Tener varias mujeres.
     Enseñar el escote.
     Tener sexo casual con animales de granja.
     Mentir.
     Contarle a un padre que has visto a su hijo de catorce bebiendo a morro de una botella de ginebra.
     Desear a la vecina casada del tercero.
     No cumplir las últimas voluntades de un muerto.
     Meter un gazapo en Wikipedia.
     Permitir que la gente se muera de hambre todos los días.
     Bombardear países con regímenes dictatoriales.
     Educar a los hijos en la superstición.
     Permitirlo.
     Volar en avión.
     Aceptar el actual estado de las cosas.

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  11. Alberto: muy interesante la lista, el único punto en el que no he dudado es el segundo, creo que es la vecina la que debería tener el dilema moral puesto que es ella la que tiene un compromiso de fidelidad con su marido, yo...si está buena y se deja...

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  12. Asier: En una guerra no todos están en el frente, en primera linea de fuego pegando tiros, esos no son más que la punta del iceberg, para que ellos puedan estar ahí otros muchos tienen que realizar otras funciones, logistica, intendencia, sanidad, cocinas, etc, hay un reparto de papeles.
    En la sociedad en general pienso que ocurre lo mismo, unos se dedican a explotar a los obreros (empresarios) y otros a reducir las fricciones que se generan (los sindicatos, a los que yo siempre comparo con el sistema de refrigeración de un coche).
    No es que los empresarios sean los malos y los sindicatos sean los buenos, cada uno cumple su función dentro del sistema, sin aceite y sin liquido refrigerante no andarias ni cien metros, el coche se quemaria , sin sindicatos que aliviaran las tensiones habria una revolución, los sindicatos no son enemigos del capitalismo, al contrario, son esenciales para su correcto funcionamiento.
    Y lo mismo se puede decir de las ONG, de cáritas, etc, desde tu punto de vista la gente que participa en estas organizaciones serían buenas personas que ayudan a los pobres y tal, desde mi punto de vista ayudan a que siga habiendo pobres eternamente pues no luchan contra la causa de los problemas sino contra sus efectos con lo cual perpetuan los problemas. Esto del reparto de papeles me recuerda al título de una película: "Tú asesina, que nosotras limpiamos la sangre"

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  13. Alberto, la ética trata las acciones de las personas, de cómo deberíamos actuar para conseguir el bien personal y común. Como eso que llamamos "bien" no está claro qué es, piensas que es algo muy subjetivo, que depende de nuestros gustos, de ahí que sea pura estética. [hasta aquí me pongo en situación, corrígeme si me he equivocado]

    Pues bien, resulta que las personas, los seres humanos, tenemos una necesidades básicas que son universales. El satisfacer esas necesidades es lo que nos va a dar un mínimo de bienestar para vivir en este mundo (y este bienestar del que hablo no depende de gustos, es universal, o mejor dicho, a todos nos gusta lo mismo). Con la ética buscamos maneras de actuar que garanticen ese bienestar para todos, nos guste o no la manera de conseguirlo, pues a veces tendremos que tomar decisiones que en parte nos perjudiquen.

    Claro que, la ética, va más allá de las necesidades mínimas, hay otro montón de valores que tiene en cuenta: los derechos humanos, la ecología, la justicia, la igualdad de oportunidades, la solidaridad, la cooperación, el respeto a la dignidad, etc. Éstos no son únicamente valores que se reconocen, sino que además pueden usarse eficientemente para generar decisiones concretas.

    Yo en todo esto veo algo más que estética, veo humanidad. Claro que igual tienes un concepto de la estética tan amplio que lo abarca todo, podría ser. Según eso, los axiomas matemáticos también se podrían reducir a la estética, y la justicia, y las teorías científicas, y todo, absolutamente todo lo que hemos creado los seres humanos.


    Mi respuesta a todas esas situaciones que planteas (a la mayoría) es: depende. Hay que ver el contexto en el que se producen, hay otros factores a tener en cuenta: si tienes el consentimiento del otro o si afecta a terceros, por ejemplo.

    Hay uno de ellos que es "desear a la vecina casada del tercero". Desear es libre y la ética ahí no se mete, nos habla de actuaciones.

    La pena de muerte la rechazo, por varias razones, pero el hecho de haber condenado a muerte a inocentes creo que ya es suficiente argumento.

    Luego hay otras con las que personalmente no estoy de acuerdo, pero admito que son discutibles: separar a los chicos de las chicas en las escuelas o las corridas de toros.


    Almazul, estábamos hablando de qué es ser buena persona, de cómo actuar en el día a día. Yo no he dicho nada acerca de empresarios o sindicatos, estoy hablando de actuaciones individuales. No sé muy bien qué me has querido decir en ese último mensaje, pero creo que he dejado bastante clara cuál es a mi entender la manera en la que tenemos que actuar cada uno de nosotros.

    Y repito, no eches la culpa a las ONG que ayudan, sino a las empresas y gobiernos que (según tú) se aprovechan de ellas para que siga habiendo pobres.

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  14. Asier, ahora lo entiendo todo: dices: "y este bienestar del que hablo no depende de gustos, es universal, o mejor dicho, a todos nos gusta lo mismo". Sinceramente, no puedo estar más en desacuerdo. No te lo voy a intentar explicar, pero te voy a pedir que hagas el esfuerzo de pensar si a Rouco Varela, Esperanza Aguirre, Pau Gasol, Lang Lang, Obama, mis alumnos, mi vecino taxista y a mí nos gusta a todos lo mismo, si para todos nosotros el bienestar consiste en lo mismo. Si, como espero, llegas a la conclusión de que son pocos los gustos que compartimos, quizá tires por el camino de la ética de mínimos, que consiste en buscar aquello que todos podemos compartir. Pero, en tal caso, descubrirás que se te queda en nada o casi nada. En cualquier caso si, tras el proceso, te queda algún universal, por favor,. háznoslo saber.

    No, no todo es estética. El teorema de Pitágoras, aún siendo realmente hermoso, no funciona por bonito, sino porque es verdad. Pero sí que lo es la ética y la moral, porque para juzgar algo como bueno debes utilizar unos criterios, y esos criterios, siempre, en última instancia, son personales, son una cuestión de gusto personal. De hecho, tú mismo, al intentar la senda de lo universal, apelas a nuestros gustos. Intentas salvar los muebles considerando estos gustos universales. Pero ni los gustos son universales, ni tampoco la forma de satisfacerlos, y esta es otra, porque, aun aceptando que todos queremos alcanzar el bienestar y que entendemos por bienestar lo mismo, cosa esta falsa, insisto, diferimos también, y mucho, en la forma de alcanzarlo. Para unos, yo entre ellos, el capitalismo no es bueno. Para otros, yo entre ellos, el marxismo no es bueno. Sin embargo, ambos son sistemas éticos, perfectamente éticos, pues intentan dar respuesta al problema del bienestar humano. Para ti la pena de muerte no es buena, pero muchos piensan que es la mejor forma de evitar que un asesino siga matando. ¿Y yo?, ¿qué pienso? Pues que no me gustaría vivir en una sociedad con pena de muerte...

    De verdad pienso que te equivocas al creer que si nos ponemos a pensar vamos a llegar a una conclusión universalmente válida. Si pensamos en la relación que hay entre los lados de un triángulo rectángulo, la solución es única, el teorema de Pitágoras, porque estamos pensando en un juego de reglas precisas y preestablecidas: la geometría plana euclídea. Pero la ética no trata de conceptos abstractos, sino de la realidad, y esta no se rige por ningún juego de reglas preestablecido. He dicho que tenemos una vocecita que nos dice lo que está bien y lo que está mal, pero esa vocecita es particular de cada uno. Entiendo que la sensación de que existe un bien universal es fuerte, muy fuerte, porque en cada sociedad, en cada momento, uno siente que hay un algo común que nos vale a todos. Pero ese algo común, ese instinto moral de la sociedad es un compromiso tácito en el que todos perdemos a cambio de alcanzar cierta estabilidad. Pero lejos de ser universal, ese algo común en realidad no es de nadie, porque a nadie satisface plenamente.

    En cuanto al tema de la responsabilidad, estoy con Almazul. Y voy a poner un ejemplo político. En España se da un bipartidismo apenas suavizado por la existencia de partidos nacionalistas. Tanto el PP como el PSOE defienden ese modelo (si no, hubiesen intentado cambiar la ley electoral), lo cual es tanto como defender que, si no salgo yo, salga el otro. Ahora llega una persona de bien y, con toda su buena voluntad, vota al PSOE. Entonces gana el PP: ¡horror!, ¿cómo es posible? ¡Qué desastre!, dirá nuestro votante. Pero resulta que él es tan responsable de que el PP esté en el poder que el votante del PP, porque con su voto al PSOE está manteniendo un sistema en el que si no está uno, está el otro, y no es razonable pensar que siempre esté el mismo, porque, en tal caso, nos podríamos ahorrar las elecciones...

    Bueno, termino con un viejo dicho alemán: “Lo contrario del bien no es el mal, sino las buenas intenciones”.

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  15. Asier: Ya sé que tu no has dicho nada acerca de empresarios ni de sindicatos, ni de liquido refrigerante tampoco, he sido yo el que he puesto esos ejemplos para tratar de hacerme entender pero como suele ocurrir en estos casos alguno se queda con la cáscara y tira la nuez y luego se queja de lo duras y malas que están las nueces, hay un proverbio que lo explica muy bien: "Cuando el sabio señala la luna el necio le mira el dedo" (Y por favor, esta vez quédate con la nuez, no te quedes con la cáscara y me digas luego que te he llamado necio, no es mi intención insultarte sino hacerte comprender, esto es como una técnica oriental, algo parecido a un koan).

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  16. Alberto, como ya he aclarado, estoy hablando de unos mínimos (no de si a uno le gusta el baloncesto o a otro el piano) y lo que a todos nos gusta es ésto: tener acceso a vivienda, a servicios sanitarios, a la educación y un mínimo de capacidad económica para salir adelante. ¿Te parece poco? Hay cientos de millones de personas que no lo tienen. Tenemos que actuar de manera que puedan tenerlo. Esto al nivel más básico, por supuesto.

    En cuanto a la estética, pones la geometría plana euclídea como ejemplo de algo que no es estética, pero realmente crees que Euclides, al menos al definir el quinto postulado, ¿no hizo (inconscientemente) una elección estética? ¿No se basó en la apariencia de la realidad que percibía? Es que dices: "Pero la ética no trata de conceptos abstractos, sino de la realidad" Esos conceptos abstractos, ¿seguro que no están basados en la realidad?
    [le estoy dando la vuelta a la tortilla, para hacer ver que, quien lo pretende, puede acabar haciendo las reducciones que le conviene, le gustan o cree adecuadas]

    En cuanto al tema de las responsabilidades, siguiendo el ejemplo político que pones, me fascina que hagas responsables de la victoria del PP a los que han votado al PSOE. A lo sumo ambos votantes serán responsables de no salir del bipartidismo, pero la responsabilidad de que gane el PP (cuando gana) es de los que han votado al PP, eso lo tengo clarísimo. No entiendo vuestra manía de extender responsabilidades ad infinitum. Ya sé que todo está relacionado con todo de alguna manera, pero considerar a todos responsables de ciertos hechos al final es como decir que todos somos culpables (o que no hay culpables), y por ahí no paso (esto ya lo he explicado).

    Almazul, es que decir que el sistema es como es gracias a que todos sus agentes funcionan como funcionan, es una trivialidad.

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  17. Asier: a mi no me parece trivial el intentar que la gente salga de su estado de alienación y tome conciencia del lugar que ocupa dentro del sistema en el que vive ¿Seguirias encendiendo tranquilamente la luz de tu mesilla de noche si supieras que cada vez que lo haces el bebé de tu vecino recibe una descarga eléctrica? Lo que intento decir es que los males de este mundo no son obra unicamente de gente sádica y perversa sino de gente normal como tu y como yo, de "buenas personas" que solo quieren encender la luz para leer un rato antes de irse a dormir, inocentes del daño que causamos con nuestros actos. Por eso pienso que el principal deber ético de cualquiera que pretenda ser una "buena persona" deberia ser informarse sobre el funcionamiento del mundo donde vive, sobre las relaciones económicas etc y pensar en el papel que juega cada uno ahí y en qué puede hacer para contribuir a cambiar las cosas realmente.

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  18. Almazul, en eso de informarse bien estoy totalmente de acuerdo, pero hoy en día el problema es encontrar información veraz, sin manipular, ni sesgada o parcial según quién nos esté informando. Ya sabes que según cómo se informe, estamos induciendo a ver las cosas de cierta manera.

    Y luego está lo que ya he explicado de las responsabilidades, no pienso cargar con todas ellas. Para cada mal que padecemos tenemos que identificar claramente los principales responsables y cómplices más directos para exigir que cambien su manera de actuar. ¿Qué eres, de los que dejan de comprar un iphone porque han leído en las noticias que se fabrican en China explotando a trabajadores en condiciones infrahumanas? Pues déjame decirte que tu aportación va a ser como intentar derribar un muro a base de soplidos. Los responsables son la empresa fabricante y los gobiernos de los países donde se instalan. Hay que tomar medidas a otro nivel.

    Feliz año nuevo a todos.

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  19. Asier: No tengo iphone, pero no, no soy de esos que tu dices pero tampoco de los otros que se creen "inocentes", de los que se escandalizan y se rasgan las vestiduras por los crimenes que se cometieron en la revolución francesa o en la soviética pero son tan miopes que no se dan cuenta que nuestra sociedad se cimenta sobre un montón de cadáveres, todo lo que tenemos lo conseguimos a base de sangre, sudor y lágrimas (propias y ajenas). Nadie es inocente, nadie puede ser inocente desde el momento en que sabe que los soldados de la OTAN bombardean Trípoli (por nombrar uno) para que yo pueda llenar el depósito de gasolina ¿O tu eres de los que se cree eso de que fuimos allí a "defender a la población civil"? Los ejércitos imperialistas sirven para lo que siempre han servido: para imponer un orden favorable a los intereses de las naciones poderosas por mucho que nos quieran hacer creer que ahora son una especie de organizaciones caritativas que van a ayudar a las ancianitas a cruzar la calle o llevar los niños al colegio.

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  20. Estoy de acuerdo con lo que comentas, Almazul, pero una cosa es saber que estás viviendo en una sociedad privilegiada (eso sí, "cimentada sobre un montón de cadáveres", como dices) y otra es sentirte responsable de ello. Me sentiría responsable si en mi vida estuviera tomando decisiones que afectan más o menos directamente a todas las personas que se están viendo perjudicadas, o si votase a los dirigentes que están permitiendo que esto ocurra. Pero no es el caso. Esto no implica que una vez sabido que esto está ocurriendo, no nos movilicemos para intentar cambiarlo. Tenemos que hacer algo en la medida de nuestras posibilidades, pero no porque seamos responsables sino porque hay otros que no están actuando de manera ética.

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